La norma ISO 9001:2015 requiere definir las funciones del personal de la empresa en función de su formación y experiencia. Periódicamente se deberá capacitar y recapacitar a los trabajadores para cada una de las tareas que desempeñan. Para todo ello se debe dejar constancia documental, como he desarrollado en otros artículos publicados en este blog (ver aquí).
Pero, como una empresa, puede detectar las inquietudes o aportaciones que puede realizar el personal, os muestro una sistemática que puede funcionar para lograrlo y medir la competencia del personal. Es importante que la organización conozca el talento en sus trabajadores, ya que son el pilar y depende de ellos el buen funcionamiento, el cumplimiento de las metodologías y las mejoras de la propia empresa.
La identificación y valoración
del talento disponible en la empresa es el principio básico y el primer pilar
en el que basar toda una serie de acciones planificadas con el objetivo de
optimizar al máximo las capacidades, competencias y contribución de los
trabajadores. Solamente conociendo, valorando e identificando nuestro
recurso más valioso, las personas, podremos orientarlo a la consecución de los
objetivos, metas y resultados de la empresa.
Habitualmente, se establecen este tipo de sistemáticas en grandes compañías, donde es muy probable poder subir en puestos de trabajo.
La situación de mercado actual y
previsible en el corto y medio plazo nos plantea la urgencia de determinar la
calidad de los recursos de forma que dediquemos todos los esfuerzos para desarrollar y fidelizar a
los mejores para afrontar en condiciones óptimas los retos que tenemos por
delante.
Los beneficios y aplicaciones de
este ejercicio nos permiten, entre otros:
- Identificar
los profesionales críticos a los que retener con medidas como la
formación, la compensación, beneficios, programas de desarrollo.
- Priorizar
y planificar la inversión en formación y acciones de desarrollo en función
del perfil resultante de la valoración.
- Analizar
los niveles de compensación y estructura salarial más adecuado en función
del rendimiento y potencial de la plantilla.
- Establecer
criterios más objetivos en las revisiones salariales
- Contar
con un sistema que ayude en determinar las promociones basadas en
rendimiento y potencial.
- Determinar las acciones correctoras en los casos de rendimiento o potencial más bajos.
Las competencias, formación y
capacitación de los empleados, sus habilidades de gestión, etc… son la base,
“los mimbres” y la adecuada gestión de todos estos elementos por parte de
supervisores y directores en combinación con las diferentes motivaciones de
cada empleado y las necesidades de la empresa (ajuste persona/puesto),
constituyen el secreto en la gestión de personas. Todos estos factores son
parte de la gestión integrada del talento y objeto de futuros programas y
prácticas para nuestra empresa.
Para ser capaces de gestionar
los recursos humanos, necesitamos saber identificar y valorar los recursos
humanos disponibles en la organización.
De forma simple, las dos
variables fundamentales de identificación de talento y que determinan el éxito
y la contribución de los profesionales de una empresa y en consecuencia
impactan de forma crucial en los resultados presentes y futuros de la
organización son:
RENDIMIENTO: entendido
como el nivel de consecución de objetivos, tareas, proyectos, establecidos para
cada empleado sea cual sea su nivel en la empresa. Se trata del nivel de
contribución dentro del área determinada para el puesto de trabajo del
empleado. Este factor es el nivel presente de contribución a los resultados de su área,
departamento, etc… Deberá evaluarlo su responsable inmediato.
POTENCIAL: entendido como la
capacidad de un empleado para asumir con éxito nuevas responsabilidades dentro
de su nivel o en niveles superiores. Este es el nivel futuro de
potencial contribución de cada empleado.
Toda empresa necesita de estos
dos niveles para conseguir resultados en el corto plazo y preparar y garantizar
el éxito en el futuro.
De la combinación de estos dos
factores podremos obtener un perfil básico de cada empleado
(RENDIMIENTO/POTENCIAL) que nos permita, además de establecer acciones como las
descritas anteriormente, construir un ranking de todos los empleados de la
organización.
En los próximos artículos os podré mostrar métodos o criterios de evaluación tanto de rendimiento como de potencial de los trabajadores.
¿Cómo podemos evaluar al trabajador?
No existe ningún método
totalmente objetivo, matemático para valorar a las personas.
En caso de dudas, se debe contar
con más de una opinión sobre el empleado.
Las valoraciones nos son fotos
fijas, las personas pueden evolucionas y cambiar tanto a mejor como a peor.
Algunas de las definiciones o
factores de potencial y rendimiento pueden ser comunes y solaparse.
Los factores utilizados en los
informes de evaluación nos pueden ser útiles para afinar nuestro criterio.
¿Cómo podemos evaluar las capacidades de un trabajador? ¿Que facetas debemos tener en cuenta?
Desde mi punto de vista he listado algunos de los aspectos que considero importantes a la hora de poder medir las capacidades del personal, y de poder analizar cómo podría responder ante un cambio de puesto de trabajo, o bien asumir más responsabilidades, etc.
ORIENTACIÓN A RESULTADOS: es consciente de la necesidad de conseguir resultados en su área de responsabilidad y colabora con el resto de la organización con el fin de alcanzar los objetivos propuestos para el área/región/grupo. Las acciones que lleva a cabo están alineadas con los objetivos, estrategia y valores que tiene la organización.
ORIENTACIÓN COMERCIAL/CLIENTE: Capacidad y motivación clara para descubrir nuevas oportunidades de negocio, para Identificar las necesidades de los clientes y anticiparse a ellas aportando soluciones con la máxima calidad.
GESTIÓN DE RECURSOS, MEDIOS Y TIEMPOS: planifica adecuadamente en función de los recursos humanos, materiales y tiempos de ejecución.
CAPACIDAD PARA DELEGAR con responsabilidad, adecuando las personas a las funciones a desarrollar. Orienta y da la capacidad de tomar decisiones y asumir las actividades y/o proyectos con responsabilidad. Hace el seguimiento de las tareas delegadas para facilitar y asegurar la consecución de las mismas.
MARCA OBJETIVOS: marca objetivos claros a corto plazo sin perder de vista los objetivos a medio y largo plazo tanto del área o región como de la empresa. Transmite con claridad lo que espera de sus colaboradores.
CAPACIDAD DE INFLUENCIA Y COMUNICACIÓN: Es capaz de influir tanto en sus compañeros como en sus superiores, aportando ideas y soluciones para la consecución de los objetivos y resultados. Transmite información, datos, opiniones, etc.. de forma clara y concisa.
MOTIVACIÓN: Genera entusiasmo en sus colaboradores, apoya en las dificultades que puedan encontrarse en la consecución de los objetivos propuestos y cuando llegan a término reconoce los resultados.
FAVORECER EL DESARROLLO DE LOS COLABORADORES: Da oportunidades de evolución y crecimiento profesional, de formación y cualificación de sus colaboradores que les permita asumir nuevas y mayores responsabilidades en su contribución a la Compañía.
Una pregunta, entonces para la evaluacion de la competencia en los trabajadores, una herramienta seria una serie de preguntas? tengo duda de como debe ser la metodologia a aplicar? Si pudieras darme alguna idea. Gracias!
ResponderEliminarBuenos días Ricardo, para evaluar la competencia de los trabajadores, simplemente puedes realizar una evaluación con supervisión por parte de algún trabajador capacitado de las actividades que realiza el trabajador a evaluar. Imagínate, queremos evaluar la competencia de las diferentes actividades que realiza un laborante en el laboratorio. Deberíamos disponer de un supervisor, una persona altamente capacitada en los ensayos que va a supervisar, para que la persona a evaluar pudiera realizar el ensayo junto a él, y el lo evaluara. Documentalmente, podríamos considerar que la realización del ensayo se tendría que hacer tres veces en tres muestras diferentes. En las mismas hojas donde el laborante apunta los resultados, pondríamos la firma del supervisor, conforme a evaluado todo el procedimiento realizado por el trabajador a evaluar. Posteriormente, si es apto, lo añadiríamos a un registro donde apareciera la actividad, el trabajador, la fecha, documentos generados con referencias y la cualificación (apto o no apto). Es un ejemplo, se realiza con todo el personal de la empresa. naturalmente los Directores se evalúan entre ellos, o bien se demuestra su valía en las diferentes actividades que realizan. Una vez que todos los trabajadores están evaluados se puede realizar una matriz de competencias, puedes ver el siguiente enlace: http://asesordecalidad.blogspot.com/2016/10/matriz-de-competencias.html#.WYBNJoTyjIV
EliminarUn saludo