Manual de calidad paso a paso es un blog donde puedes encontrar información sobre las normas ISO 9001, ISO 14001, ISO 45001 e ISO 17025. Implantación y seguimiento. Elaboración de documentación. Adaptación a las nuevas versiones de las normas. Integración de sistemas de gestión. Gestión de riesgos. Foro de calidad. Auditorías internas. Asesoramiento online.

lunes, 24 de enero de 2022

Tipos de Objetivos en la gestión de la empresa

Con la finalidad de garantizar una mejora continua, toda empresa debe plantearse unas metas a conseguir a corto, medio y largo plazo en función de su realidad y necesidades. Por ese motivo, podemos comprobar que todas aquellas normas ISO que desarrollan los requerimientos de los diferentes sistemas de gestión, como por ejemplo la norma ISO 9001:2015, incluyen requisitos específicos en relación a la descripción  y el plan de ejecución de los objetivos de la empresa.


Uno de los principales objetivos que todas las empresas tienen en común, es la de aumentar los beneficios, que se consideraría un objetivo general donde se debe tener en cuenta la misión y visión de la empresa. En realidad no podemos definir esta meta tal cual, sino que es necesario definir acciones reales que permitan alcanzar el propósito final, a estas metas podemos clasificarlas en los objetivos específicos. Un ejemplo de objetivo específico podría ser aumentar el rendimiento en los procesos productivos, disminuir los costes... Además cada una de estas acciones lleva asociado unas actividades que requieren de unos recursos concretos que deberán realizarse en un plazo de tiempo concreto. 


A continuación vamos a desarrollar un caso concreto como ejemplo: si consideramos aumentar el rendimiento de los procesos productivos, el paso siguiente es pensar cómo hacerlo y si la empresa puede o no permitírselo. Algunas de las posibles acciones a realizar serían las siguientes:


- Aumentar los puntos de control de calidad en diferentes puntos del proceso productivo con la finalidad de detectar errores antes de que sucedan y disminuir así los desperdicios generados, disminuyendo los costes de fabricación.
- Cambiar las metodologías y procedimientos para optimizar los procesos.
- Sustituir la maquinaria por otra que a medio plazo permita disminuir el coste de fabricación.
- Disminuir el stock de materias primas aceptando encargos bajo pedido.


Como podéis observar para alcanzar el objetivo se pueden establecer algunas acciones que no comportan un coste elevado, ya que destinando horas de personal cualificado se puede llegar a obtener unos buenos resultados. Estaríamos en el caso de los dos primeros puntos descritos anteriormente. 


Por otro lado, el tercer punto, requiere de una inversión inicial, que se irá amortizando con el aumento de la efectividad en el proceso. En este caso, antes de pensar en esta opción la empresa deberá realizar un estudio económico, con la finalidad de calcular el tiempo necesario para amortizar la inversión, y simular los beneficios que va a obtener si se decanta por esta opción. En casos como este, se deberá analizar y evaluar el riesgo que comporta llevarlo a cabo.


El último ejemplo, consiste en cambiar completamente el funcionamiento de la empresa, cambiando los criterios tanto de aceptación de pedidos, el proceso de producción y el servicio al cliente. Por ejemplo, cuando un cliente pregunte sobre un producto se tendrá que hacer una previsión de cuándo se tendrá listo el producto, ya que no se tendrá stock para ofrecérselo inmediatamente, y para ello deberá estar completamente coordinado con los proveedores de materiales. Debe establecerse una coordinación completa. Este tipo de Objetivos suelen ser estratégicos, ya que un cambio sustancial, además de necesitar de grandes recursos afecta al funcionamiento global de la empresa y a los clientes.


Mediante estos simples ejemplos, podéis comprobar que existen numerosos objetivos que la empresa debe establecer, asignando a cada uno de los objetivos acciones concretas a realizar en un plazo de tiempo. Por lo tanto, los objetivos deben planificarse. Con la finalidad de verificar o analizar la ejecución de las diferentes acciones se suelen utilizar indicadores asociados a los objetivos. Estos indicadores tienen que darnos la información necesaria para saber si se están realizando adecuadamente y dentro del plazo definido. Si no fuera así, se deberían establecer acciones adicionales para corregir las posibles desviaciones detectadas.


Teniendo en cuenta la explicación anterior podemos realizar diferentes clasificaciones de los objetivos, estas son las habituales:


Se podrían obtener más clasificaciones como puede ser:


- En función del riesgo. Algunas de las acciones a llevar a cabo pueden comportar, como hemos visto un cambio de rumbo en la misión y visión de la empresa, o bien la inversión de grandes recursos financieros y económicos, entre otros, que comportan un alto riesgo que debe ser evaluado y contemplado antes de proponer dicho objetivo. 


- Considerar la cantidad de los recursos necesarios para llevarlos a cabo.


- Su origen. El objetivo puede proceder de varias fuentes diferentes, por ejemplo, derivado de la identificación del contexto de la organización (debilidades, amenazas y oportunidades), procedentes de hallazgos encontrados en auditorías...


Os facilito algunos enlaces artículos relacionados que redacté ya hace algún tiempo para completar la información en caso de necesitarlo. Además de profundizar en el concepto, encontraréis algunos ejemplos de cómo gestionar los objetivos y cómo realizar la planificación y seguimiento de los mismos. Estos enlaces son los siguientes:


Objetivos del Manual según la ISO 9001:2015

Relaciones entre objetivos e indicadores

Listado de Objetivos de calidad

La necesidad de las empresas de fijar los objetivos

Proceso estratégico de la empresa


 

0 comments:

Publicar un comentario

 
Copyright © . Manual de gestión de calidad paso a paso - Posts · Comments
Theme Template by BTDesigner · Powered by Blogger
Visítenos en Google+